Si te estás preguntando cómo hacer una auditoría SEO básica, probablemente ya sabes que el posicionamiento web es vital para que tu sitio aparezca en los primeros resultados de Google. Pero incluso si ya tienes una web en funcionamiento, es posible que no esté rindiendo como debería. Aquí es donde una auditoría SEO entra en juego. Piensa en ella como un chequeo médico para tu sitio: detecta errores, mide tu salud digital y te da pistas sobre cómo mejorar. No necesitas ser un experto técnico para empezar, solo debes saber dónde mirar y qué analizar. A continuación te explico de manera clara, sencilla y paso a paso cómo puedes hacerlo tú mismo, sin herramientas costosas y con una visión muy práctica.
El SEO se divide en tres grandes bloques: SEO técnico, SEO on-page y SEO off-page. En esta auditoría básica nos enfocaremos en los aspectos fundamentales de los dos primeros. Vamos a revisar velocidad del sitio, arquitectura, errores de rastreo, contenido, palabras clave, metadatos y otros factores clave que afectan directamente tu visibilidad. Si trabajas con una agencia como CreativosWeb Bogotá, estos son los puntos que ellos también tendrán en cuenta. Así que empecemos con los pasos fundamentales que no pueden faltar en tu auditoría.
1. Revisa el estado general del sitio
Antes de meternos en herramientas avanzadas, lo más básico es observar tu web como si fueras un visitante. ¿Carga rápido? ¿Se ve bien en celular? ¿Tiene enlaces rotos? Esta revisión manual te puede dar más pistas de lo que crees. Puedes usar PageSpeed Insights de Google para analizar la velocidad de carga en móviles y escritorio. Si notas que se demora más de 3 segundos en abrir, hay mejoras urgentes que implementar.
También es muy importante verificar que tu sitio esté adaptado a dispositivos móviles. Usa la prueba de compatibilidad con dispositivos móviles de Google para esto. Hoy en día, la mayoría del tráfico llega desde celulares, y si tu web no se ve bien en esos dispositivos, pierdes visibilidad y conversiones. Además, verifica que el sitio esté en HTTPS y no HTTP, ya que la seguridad también es un factor de posicionamiento.
2. Analiza el rastreo e indexación en Google Search Console
La herramienta gratuita más poderosa que tienes es Google Search Console. Si no la tienes configurada, ese es el primer paso. Aquí podrás ver cómo Google ve tu sitio. Verifica si hay errores de rastreo, páginas no indexadas o problemas de cobertura. En la sección “Cobertura”, revisa si hay URLs con errores 404, redirecciones fallidas o páginas bloqueadas por el archivo robots.txt.
Además, en la pestaña “Sitemaps” puedes confirmar si ya has enviado tu mapa del sitio, lo cual ayuda a Google a rastrear tus páginas de manera eficiente. Si aún no lo tienes, puedes generarlo fácilmente con plugins como Yoast SEO (para WordPress) o desde herramientas como XML-Sitemaps.com. Si usas WordPress y aún no sabes cómo configurarlo, puedes consultar esta guía que tenemos en nuestro blog.
3. Evalúa los títulos, meta descripciones y estructura H1
Un error muy común que afecta el SEO on-page es tener títulos duplicados o mal escritos, meta descripciones genéricas y estructuras de encabezado incorrectas. Cada página de tu web debe tener un título único y una meta descripción atractiva que incluya la palabra clave principal. Puedes analizar esto usando Screaming Frog SEO Spider en su versión gratuita.
También asegúrate de que cada página tenga un solo encabezado H1 y que esté alineado con el contenido principal. Los encabezados deben estar jerarquizados correctamente (H2 para subtítulos, H3 para sub-subtítulos, etc.). Esto ayuda no solo al posicionamiento, sino también a la comprensión de tu contenido por parte de los visitantes. Si te interesa aprender más sobre optimización de contenido, visita nuestra página de estrategias SEO.
4. Analiza las palabras clave y su ubicación
Verifica que estés usando palabras clave relevantes y relacionadas con tu negocio. Una auditoría básica implica revisar si esas palabras aparecen en los lugares adecuados: en el título, en la meta descripción, en el H1, y a lo largo del contenido, pero sin caer en la sobreoptimización. Herramientas como Ubersuggest o Answer the Public pueden ayudarte a identificar términos populares relacionados con tu nicho.
Además, ten presente la intención de búsqueda. No es lo mismo optimizar para “comprar zapatillas rojas” que para “tipos de zapatillas”. La primera tiene una intención comercial, la segunda informativa. Ajusta tu contenido según lo que tu público está buscando. Si necesitas ayuda para crear contenido optimizado, explora nuestro servicio de redacción de contenidos SEO.
5. Revisa enlaces internos y externos
Los enlaces internos ayudan a distribuir la autoridad de tu sitio y guían a los usuarios por tus páginas más importantes. Asegúrate de tener enlaces naturales que conecten contenidos relacionados. Por ejemplo, si tienes un blog sobre tipos de diseños web, enlaza a tu página de diseño web corporativo.
También es importante revisar los enlaces externos (salientes). ¿Estás enlazando a sitios confiables? ¿Hay enlaces rotos? Puedes usar herramientas como Broken Link Checker para identificar errores rápidamente. Recuerda que Google valora que enlaces a fuentes externas útiles y relevantes, pero también penaliza si rediriges a sitios de baja reputación.
6. Evalúa el contenido: originalidad, valor y longitud
Un punto crítico en cualquier auditoría SEO básica es evaluar si tu contenido realmente ofrece valor. ¿Tus textos son originales o copiados de otros sitios? ¿Tienen suficiente profundidad como para resolver la duda del usuario? Google premia los contenidos útiles, bien redactados y extensos. Un artículo de menos de 300 palabras rara vez se posicionará bien, salvo que tenga muchísima autoridad.
Además, analiza si tu contenido está alineado con tu público objetivo. Un sitio de servicios debe ofrecer respuestas claras, soluciones reales y llamados a la acción visibles. Si tu web es muy técnica o genérica, puede que estés perdiendo oportunidades de conectar con quienes te visitan. Si necesitas una estrategia de contenido a la medida, no dudes en contactarnos desde nuestra página de contacto.
7. Verifica la arquitectura del sitio y los menús de navegación
La estructura de tu sitio debe ser lógica, fácil de explorar y no más profunda de tres clics desde la página principal. Un menú claro, una buena jerarquía de páginas y una arquitectura en forma de silo ayudan tanto a usuarios como a buscadores a entender tu contenido. Si tienes un blog, asegúrate de tener categorías bien definidas y enlaces que faciliten la navegación.
También puedes usar un mapa visual de tu sitio (como los que ofrece Octopus.do) para identificar páginas huérfanas o secciones innecesarias. En sitios con muchas páginas, una mala estructura puede ser la causa de caídas en tráfico o problemas de indexación.
Lista paso a paso para hacer tu auditoría SEO básica
Accede a tu sitio como usuario: revisa velocidad, versión móvil y errores visibles
Usa PageSpeed Insights y la prueba de compatibilidad móvil de Google
Configura y explora Google Search Console: errores de cobertura, sitemaps, indexación
Revisa títulos, descripciones y H1 con Screaming Frog o manualmente
Verifica el uso de palabras clave en contenido y metadatos
Evalúa la intención de búsqueda de tu contenido
Comprueba enlaces internos y externos, corrige enlaces rotos
Analiza el contenido: originalidad, longitud, utilidad
Revisa la arquitectura de tu sitio, estructura de menú y categorías
Documenta todo en un archivo de seguimiento para futuras mejoras
Recuerda que una auditoría SEO no es un proceso de una sola vez. Es recomendable hacerla cada tres o seis meses, dependiendo del tamaño de tu sitio y tus objetivos. Si prefieres delegarlo a expertos, en CreativosWeb Bogotá tenemos experiencia ayudando a negocios de todo tipo a mejorar su posicionamiento y visibilidad online. Puedes explorar todos nuestros servicios aquí.
Mauricio Melo – 21/06/2025